La epidermis es la cubierta
protectora principal del cuerpo vegetal, forma la primera línea de defensa
contra el daño físico o contra agentes patógenos y protege a la planta de la
desecación.
Figura 1. En la epidermis de las
hojas y de la mayoría de los tallos hay una cubierta cérea llamada cutícula que ayuda a evitar la pérdida
de agua.
En las plantas no lechosas, el
tejido dérmico, está formado por una sola capa de células compactas llamada epidermis.
En las plantas leñosas, un tejido
protector llamado peridermo reemplaza
a la epidermis en las regiones más antiguas de tallos y raíces.
Figura 2. Crecimiento secundario, con
presencia de peridermis en lugar de epidermis.
La endodermis es una capa de tejido dérmico que se encuentra en el
interior de la planta., está presente en prácticamente todas las raíces, es un tejido interno de modo compacto y de
aspecto parenquimático.
Delimita dos regiones
en el interior de la planta:
·
Corteza por fuera
·
Medula por dentro
La endodermis divide
el apoplasto de la raíz en dos compartimentos, las
células de la endodermis contienen suberina formando la banda de Caspary que
controla el paso de agua y ayuda al desplazamiento selectivo de
minerales.
Figura 3.: La
endodermis es una capa delgada formada por células pequeñas y se encuentra en
la parte interior del córtex, alrededor del tejido vascular.
En las plantas el crecimiento es
indeterminado; en todo momento, una planta típica posee órganos embrionarios, órganos
en desarrollo y órganos maduros.
Las plantas tienen un crecimiento
indeterminado, pues sus tejidos embrionarios, llamados meristemas, son perpetuos. Existen dos tipos principales: meristemas apicales y meristemas laterales.
Los meristemas apicales, ubicados en los extremos de las raíces y
en los brotes, proporcionan células adicionales que le permiten a la planta
crecer en longitud, en un proceso llamado crecimiento primario. El crecimiento primario
le permite a la raíz extenderse a través del suelo y a los brotes aumentar su exposición
a la luz y al CO2. En las plantas herbáceas (no leñosas), el crecimiento
primario produce casi la totalidad del cuerpo de la planta.
En cambio, en las plantas
leñosas, el crecimiento se produce aumentando la circunferencia en las zonas de
los tallos y las raíces donde ha cesado el crecimiento primario. Este aumento
del grosor, llamado crecimiento secundario, se produce por la actividad de los meristemas laterales, llamados cambium
vascular y cambium de corcho. Estos cilindros de células en división se
extienden a lo largo de las raíces y de los tallos.
El cambium vascular aporta capas de tejido vascular llamadas xilema
secundario (madera) y floema secundario.
El cambium de corcho reemplaza a la epidermis por peridermis, que es
más gruesa y rígida.
Figura 4. Panorama general del
crecimiento primario y secundario.
Algunas células de la epidermis
están modificadas para formar estomas y distintos tipos de pelos.
ESTOMAS
Los estomas son coberturas en la
epidermis, localizadas sobre todo en la superficie inferior de la hoja, que
tienen a su cargo el intercambio de gases del vegetal. Estas estructuras están
compuestas por dos células epidérmicas especializadas denominadas células oclusicas que regulan el diámetro del
poro. Los estomas están dispersos en la epidermis de acuerdo con patrones
específicos de cada especie.
Figura 5, Estructura de estomas.
TRICOMAS O PELOS
Son apéndices derivados de
células epidérmicas que pueden presentar diversas formas y suelen hallarse en
todas las partes de vegetal. Cumplen funciones de protección, absorción y secreción.
Figura 6. Estructura tricoma.
Referencias.
Campbell (2007). Biología.7°
Edición. Panamericana. España.
Alberts. Introducción a la
Biología Celular. 2° Edición. Panamericana. España.
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Fahn A. 1990. Anatomía
Vegetal. Cuarta Ed. Pergamon Press.
Esaú K . 1977. Anatomía de las plantas con semillas. 2ª.Ed. John Wiley and
Sons.Nueva York.
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